
En la industria de la automatización, cada componente de la línea de producción debe funcionar con precisión y coherencia. La máquina etiquetadora no es la excepción. Aunque a simple vista puede parecer un equipo secundario, su correcta integración tiene un impacto directo en la eficiencia operativa, el cumplimiento normativo y la presentación del producto final.
A continuación, te compartimos los factores clave que debes considerar antes de integrar una etiquetadora a tu línea de producción
Cada producto tiene necesidades distintas. ¿Trabajas con botellas, frascos, cajas, latas o bolsas? ¿Son rígidos o flexibles? ¿Redondos, planos o irregulares? El tipo de envase y la superficie de aplicación determinarán el tipo de etiquetadora adecuada (envolvente, frontal-dorsal, superior, inferior, etc.).
Tip: Una máquina personalizada garantiza un mejor ajuste al diseño de tu envase y tipo de etiqueta
La etiquetadora debe estar sincronizada con el ritmo de tu línea. Si es más lenta que los equipos anteriores o posteriores, generará cuellos de botella; si es más rápida, se desperdiciará capacidad.
Recomendación: Calcula el número de unidades por minuto (UPM) y asegúrate de que la etiquetadora tenga margen para crecer si planeas aumentar la producción.
Un mal etiquetado puede generar rechazos, problemas con reguladores o afectar la imagen del producto. Por eso, es importante que el equipo mantenga un posicionamiento constante, incluso en jornadas prolongadas.
Importante: Verifica si la etiquetadora incluye sensores de posición, sistemas de control automático y fácil calibración.
Antes de elegir un modelo, considera el espacio físico disponible, dirección del flujo de la línea (izquierda a derecha, viceversa) y altura de transportadores. Todo debe armonizar.
¿Usas etiquetas autoadheribles, termoencogibles o con tecnología RFID? Cada tipo requiere mecanismos distintos. También influye el material: papel, polipropileno, PET, etc.
Consejo: Asegúrate de que la máquina sea compatible con tus materiales actuales y futuros.
Un equipo confiable debe tener respaldo. Asegúrate de contar con soporte técnico rápido y disponibilidad local de refacciones. El tiempo de paro por una pieza faltante puede costar mucho más que la inversión en un buen proveedor.
La automatización moderna implica conectividad. Considera si necesitas que la etiquetadora se comunique con tu sistema de control central para monitoreo, trazabilidad o ajustes automáticos.
Integrar una máquina etiquetadora no es solo una compra de equipo, sino una decisión estratégica. Una buena elección optimiza tiempos, reduce errores y mejora la presentación final del producto. En SAUTEM te acompañamos desde el análisis inicial hasta la puesta en marcha, con soluciones personalizadas y soporte continuo.
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